Seguridad LPM entra en concurso de acreedores
Crónica de una muerte anunciada. Desde la USO lo veníamos advirtiendo.
La compañía, que es la adjudicataria de la seguridad de las estaciones de ADIF en Aragón, ha entrado en concurso de acreedores.
La empresa tenía un embargo por una deuda de 12 millones entre Hacienda y la Seguridad Social.
Seguridad LPM ha comunicado al comité de empresa su entrada en el concurso de acreedores, además de informar de que «no saben cuándo podrán hacer frente al abono de la nómina del mes de diciembre y la paga extra de navidad».
La empresa LPM tiene una plantilla de alrededor de 800 trabajadores en España, de los que 74 realizan su labor en Aragón, concretamente, en las estaciones de tren y en los almacenes y talleres de ADIF.
Esta situación está generando preocupación en los trabajadores, no solo por la situación económica de la empresa sino por el ejercicio de la actividad profesional en un momento en el que «nos encontramos en un nivel 4 de alerta antiterrorista».
Fuente: eleconomista.es